Un terrible accidente cobró la vida de su madre hace tres años, y Xu Nuo nunca pudo recuperarse por completo del trauma. Desde ese día, Xu Nuo vive con un trastorno afectivo tan severo que ha perdido toda conexión con sus emociones. Incapaz de reír, llorar o incluso amar, Xu Nuo no tiene forma de relacionarse con otras personas, ya que ha perdido toda capacidad de empatizar con los demás. Incapaz de sentir ningún sentimiento de culpa o remordimiento, se ha convertido en un despiadado experto en lo que respecta a fusiones y adquisiciones corporativas. Aunque es conocido por hacer un buen trabajo, sus drásticas técnicas lo han convertido en el blanco de varias personas descontentas.
Cuando la necesidad de un guardaespaldas se vuelve evidente, Xu Nuo comienza la ardua labor de reclutamiento. Entre los muchos solicitantes que compiten por el puesto se encuentra Ke Si Yi, una estudiante de economía que sueña en secreto con convertirse en una luchadora profesional. Gracias a sus extremadamente desarrollados sentidos y reflejos ultrarrápidos, Si Yi consigue fácilmente el trabajo. Aunque Xu Nuo se alegra de contar con protección adicional, hay algo en la forma tan fácil en que Si Yi hace uso de la violencia que lo hace sentir incómodo. Sin embargo, cuando Si Yi se arriesga por él, él comienza a sentir algo más, aunque no está muy seguro de qué es ese algo.
A medida que se desarrolla la relación entre la defensora y el protegido, las emociones que Xu Nuo perdió hace mucho tiempo comienzan a regresar poco a poco y, ahora con ellas, se le presenta un mundo completamente nuevo de posibilidades. Pero, en este nuevo mundo lleno de emociones, Xu Nuo debe preguntarse, ¿es capaz de aceptar los sentimientos que parece haber desarrollado por Si Yi?
